Poyet: "hace mucho que no hacía un trabajo táctico como éste"

Passarella por dentro

La nueva celeste probó un 4-4-4, el 4-3-2-1, también un 1-2-4-1-2 y el 1-4-2-1-2, y hasta el 1-4-3-2. En la base de todo, sin embargo, hay una única idea táctica: la de Passarella.

HEBER A. GONZALEZ

MALDONADO.-- "¡Paaah! hace mucho tiempo que no hacía un táctico como éste!". La frase fue de Gustavo Poyet, después de culminados los 35' de entrenamiento que Passarella dispuso la tarde del jueves pasado en Maldonado.

La de Poyet es una frase contundente. Terminante. Con pocas palabras resalta la importancia de ese trabajo.

El martes, primer día de fútbol en la cancha dirigido por el técnico celeste, apareció un equipo con línea de cuatro en el fondo, línea de cuatro en el medio y dos futbolistas adelante; o sea, un 4-4-2 y, por momentos, 4-3-1-2. Para este sistema Passarella indicó que el volante central defensivo no se debe mover de esa zona, tiene que relevar y ordenar a sus compañeros. Los volantes de ambos lados, el enganche y hasta los dos puntas están para que ataquen. Eso sí, cuando termina la jugada, cualquiera de ellos tiene que saber cuáles son las posiciones --la personal y del resto de los compañeros-- para volver rápido y cubrir la que tenga más cerca, aunque no sea la suya.

Dos días más tarde, el jueves, apareció otra fórmula táctica en la cancha. Se trató de un 1-2-4-1-2 , que a veces puede llegar a ser un 1-4-2-1-2 y también hasta un 1-4-3-2. Con esta fórmula, Passarella ordenó un libre que no se debe mover de su zona, con dos zagueros que pueden llegar a ser tres cuando el rival ataca con tres delanteros, para lo cual uno de los volantes centrales da un paso atrás y se mete en la línea de zagueros. La variabilidad del sistema se debe a la particularidad que tenga el rival y a las situaciones que aparezcan durante el partido: "está claro que si te están dominando, los dos que juegan de laterales volantes van a tener que volver, en tanto si el que domina sos vos, entonces se convierten en volantes delanteros", ha dicho el técnico. El sistema también impone un pressing sobre la pelota lejos de su propia área, tratar de jugar en el medio con rapidez y precisión, para lo cual se debe jugar a dos toques e inclusive tener velocidad mental para ganar los rebotes.

El sábado en el Centenario nuevamente apareció este sistema y Passarella, sobre el mismo agregó que "Montero se sintió más cómodo, Damián (Rodríguez) está acostumbrado en su equipo a quedar mano a mano, Sorondo tiene las características para jugar ahí. Tenemos dos laterales que van mucho al ataque y que es bastante difícil bancarlos por el ida y vuelta que hacen. Y en el medio hay buen fútbol, aunque aún falta entender que hay que desprenderse más rápido de la pelota".

Frente a todo eso, un adelanto: la fórmula táctica para afrontar la Eliminatoria no es una sola. Ni siquiera está elegida. Es que el técnico dice que "será el sistema al que mejor se adapten los jugadores lo que también depende del poder de convencimiento que tengamos sobre ellos".